Página Siete • Recomiendan prudencia en el gasto ante la caída del crudo • 19/01/2015
Luis Escóbar
Los analistas recomiendan a la ciudadanía prudencia en los gastos que puedan realizar ante una caída prolongada del precio del petróleo. El impacto para la población es indirecto y puede darse en el mediano plazo si la economía registra menor actividad.
«Es un momento para actuar prudentemente y eso no quiere decir que la gente se asuste. Por ejemplo, no hay que gastar en exceso, cuidar los recursos para prepararse ante una eventualidad de vacas flacas siempre y cuando el precio del petróleo se mantenga bajo por un largo tiempo”, opina el analista económico, Armando Álvarez.
El 2014 el precio del barril de petróleo West Texas Intermediate, que sirve al país para cotizar el precio de gas de venta a Argentina y Brasil, comenzó en 95,4 dólares mientras que hasta el viernes cayó a 48,69 dólares, casi casí la mitad de su precio. Se debe recordar que el máximo histórico llegó a 145,9 dólares por barril en julio de 2008.
Según Álvarez, una cotización baja del crudo tendrá efecto en menores ingresos por las exportaciones de gas, que representan el 46,6% de las ventas del país. «Eso implica que habrá menos circulante y obviamente puede tener un efecto en el dinamismo de la economía”, asevera.
En el otro frente, el impacto positivo de la caída de costo del crudo, en criterio del analista puede darse con una rebaja de los precios de los productos importados de aquellos países que se beneficiaron con menores costos de energía.
El expresidente del Banco Central de Bolivia (BCB) Armando Méndez coincide que al recibirse menos ingresos por la venta de gas, la capacidad de gasto del Gobierno disminuirá y la economía se enfriará un poco.
«Es un proceso lento, pero la actividad económica se va a ir frenando. Es lógico, pero no es para desesperarse. Habrá menos actividad económica, menos trabajo y es importante que los sindicatos tomen conciencia de esto y no realicen pedidos de aumentos salariales fuera de lugar. Es un mensaje para todos que debemos frenar nuestras aspiraciones para el 2015”, puntualiza.
Por ejemplo, el informe de perspectivas económicas del Banco Mundial (BM) para América Latina y el Caribe prevé que Bolivia tendrá un crecimiento de 4,5% este año, pero disminuirá más, hasta 4,3% en 2016 y 4% en 2017. El indicador para el 2015 es inferior al previsto por el Gobierno que asciende a 5,9%.
Para Méndez la proyección del organismo internacional es un indicador de que la economía se va a estacionar en 2015 como consecuencia de la caída del precio del petróleo.
El especialista, Juan Luis Espada Vedia del Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (CEDLA) sostiene que la baja de recursos afectará la capacidad de inversión pública del país y la creación de nuevas fuentes laborales.
«Al existir la posibilidad de diminución de la inversión pública, esta puede afectar en el nivel de empleo o en la precarización del empleo en determinados sectores como es el caso de la construcción”, subraya.
El economista Alberto Bonadona, coincide con el CEDLA en que puede haber una menor generación de fuentes de trabajo.
«Algunos gastos que estaban haciendo las gobernaciones o municipios posiblemente disminuyan y puede haber gente que no pueda mantener el empleo”, advierte.
Descenso de precios sin impacto en combustibles
Los expertos consideran que a diferencia de otras naciones, el descenso de las cotizaciones del petróleo, no tiene impacto alguno en una rebaja de los precios de los carburantes en el país, debido a que están subvencionados por el Estado.
«Para los ciudadanos bolivianos no habrá un cambio. Internacionalmente, se reportan precios más bajos de la gasolina que en Bolivia, pero no habrá ningún cambio porque los precios están subvencionados”, afirma el ex presidente del Banco Central de Bolivia, Juan Antonio Morales.
El precio promedio de la gasolina en Estados Unidos llega a 0,64 dólares (Bs 4,45) el litro y en el estado de Texas es aproximadamente de 0,52 dólares, mientras que en Bolivia se vende en 0,53 dólares (Bs. 3,74 ).
Para el economista Armando Álvarez el precio de los carburantes no variará. «No subió la gasolina cuando el precio del petróleo era alto y se mantuvo ahora que el precio bajó tampoco existirá una variación. De alguna manera se llega a compensar los costos que han significado el mantener el precio”, apuntó.
El expresidente del BCB Armando Méndez también coincidió en que la baja del petróleo no beneficia al consumidor.
El único impacto positivo es que los costos de importación y la subvención del diésel y la gasolina disminuirán.
PGE 2015
Estimación El Gobierno fijó en 80,36 dólares el precio promedio del barril de petróleo para 2015 y prevé recibir ingresos de al menos 20.276 millones de bolivianos por hidrocarburos, según el proyecto del Presupuesto General del Estado (PGE) 2015.
Precios Calcula un precio promedio de exportación del gas natural de 9,71 dólares el millón de BTU (unidad térmica británica) a Argentina. Como referencia, el último trimestre de 2014 el país vecino pagó 10,02 dólares. En el caso de Brasil, se proyecta un precio promedio de 8,31 dólares el millón de BTU.
Realidad El precio del barril de petróleo West Texas Intermediate, de referencia para el país se cotizó hasta el viernes en 48,69 dólares.
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