Jornada • Nuevas «falsas expectativas» sobre industrialización del hierro del Mutún • 21/03/2016
«Varios fueron los intentos por parte del Estado para hacer realidad la explotación del Mutún, los mismos se remontan desde inicios del siglo XX, sin que ninguna haya prosperado. Este yacimiento de hierro es la segunda reserva de Sudamérica después de Cerro dos Carajás ubicado en el noreste de Brasil, y la séptima reserva de hierro del mundo, con 42.000 millones de toneladas de hierro; sin embargo, pese a eso, la inviabilidad ha marcado la constante en esta intención», asegura el Cedla.
El último intento fallido para el Mutún, fue de la mano de la empresa india Jindal Steel and Power, quien a través de un contrato firmado con el gobierno de Evo Morales, se comprometió a la construcción de un complejo minero-siderúrgico, con una inversión de 2.300 millones de dólares, sin embargo el desenlace de este intento es bien conocido, resumiendo que la Jindal no realizó inversión alguna y abandonó el país.
Hoy el gobierno de Evo Morales, tras su fracaso con la Jindal, vuelve a realizar el intento de lograr la industrialización del Mutún, esta vez de la mano de los inversionistas de turno, con capitales chinos, en medio de un escenario adverso del mercado de hierro.El investigador del CEDLA, Pablo Poveda, en su estudio: «Nuevas falsas expectativas sobre la industrialización del hierro del Mutún a cargo de la empresa china Sinosteel», toca aspectos que omite el gobierno, además de la propuesta realizada por profesionales bolivianos.»Parece ser que nuevamente se alientan falsas esperanzas a cerca de la industrialización del hierro del Mutún. En primer lugar, se tiene un mercado mundial del acero saturado, donde no parece haber perspectivas de reactivación en la medida que los países industrializados han reducido su consumo y la China parece haber llegado al máximo de su crecimiento económico.Por otra parte, la alta competencia en el mercado del acero llevará a un proceso de centralización de capitales, donde las emergentes empresas chinas tienen mayor probabilidad de ser absorbidas. Asimismo, la expansión capitalista de la China a nivel mundial se lleva a cabo de manera desordenada, con la finalidad de acaparar mercado y concesiones de recursos naturales, garantizando su presencia sin importar el rendimiento económico.En ese sentido parece ser más importante para los chinos el hacerse de una de las reservas más importantes de hierro del mundo, que la industrialización en Bolivia de esta materia prima, lo que parece ser una réplica del modelo parasitario chino. Eso sugiere la insignificante industrialización que se plantea y el menosprecio del gobierno de iniciativas locales para industrializar el hierro, como es la tecnología «kanatar-acero», que plantea con menores inversiones resultados similares a los que realizaría Sinosteel».
Para ver la página de origen haga click aquí.
Deja una respuesta