Cambio
En un año de operación, la Planta de Separación de Río Grande, ubicada en Santa Cruz, ahorró al Tesoro General del Estado (TGE) $us 96,79 millones que debían ir a la subvención, generó ingresos por $us 50 millones y dejó un beneficio neto de $us 147 millones para los bolivianos.
Los datos fueron revelados ayer por el presidente de YPFB Corporación, Carlos Villegas, en una amplia entrevista que le hizo el programa El Pueblo es Noticia, transmitido por la radio y el canal estatal, en la cual detalló los cuatro proyectos, en los cuales se invierte $us 1.800 millones, y que sientan las bases para el proceso de industrialización, que fue demandado hace 70 años atrás.
La Planta de Separación de Líquidos Río Grande está ubicada en municipio Cabezas, provincia Cordillera del departamento de Santa Cruz. Se invirtió $us 159,4 millones y comenzó a producir 330 toneladas métricas por día (TMD) de gas licuado de petróleo (GLP), equivalente a 33.000 garrafas, el 2 de agosto de 2013.
La capacidad total de producción alcanza a 361 TMD de GLP, 440 barriles día (BPD) de gasolina natural y 190 BPD de isopentano.
Villegas elogió los resultados de este emprendimiento “que permitió al país ser autosuficiente en gas licuado de petróleo” o garrafas de gas.
De la producción total de Río Grande, el 63 por ciento abastece la demanda del mercado interno y el 37 por ciento se lo destina a la exportación a Paraguay, Uruguay y Perú.
“Nos hemos ahorrado, en un año, 96,79 millones de dólares y hemos generado ingresos por 50 millones de dólares, por lo tanto hay un beneficio total, un beneficio neto para el Estado boliviano de 147,86 millones de dólares”, indicó el presidente de YPFB.
Río Grande, junto a la Planta de Separación de Gran Chaco, representan la plataforma base para la industrialización del gas natural.
Villegas señaló que ambos proyectos eran posibles de ejecutarse en los años anteriores a la asunción del presidente Evo Morales, en enero de 2006, pero ninguno de los gobiernos, de los que fueron parte Samuel Doria Medina (ministro del Gobierno de Jaime Paz Zamora) y Jorge Quiroga (ministro de Paz Zamora y vicepresidente de Hugo Banzer) no lo promovieron.
“Si la planta de Separación de Río Grande se hubiese construido hace muchísimos años atrás ¿cómo se hubiese ahorrado en la importación de gas licuado de petróleo?, pero ellos nunca han estado asociados pues a los intereses del país, lo único que hacían era satisfacer los requerimiento de las empresas extranjeras”, mencionó.
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