Para el período 2016-2025 el Gobierno proyectó una inversión de $us 31.000 millones en el sector de hidrocarburos. De esta inversión más del 60%, alrededor de $us 19.000 millones, será para la exploración y explotación.
De acuerdo con el Gobierno, de los $us 19.000 millones que serán destinados a tareas de exploración y explotación, el Estado asumirá la ejecución de $us 11.000 millones, 58% del total, y los restantes $us 8.000 millones por las petroleras privadas que tienen contratos de operación en Bolivia.
En el período 1996-2005, las inversiones en exploración y explotación fueron $us 4.500 millones, mientras que entre 2006 y 2015 estos recursos se incrementaron a $us 11.400 millones, señalan los datos del Ministerio de Hidrocarburos.
Las reservas probadas de gas natural, certificadas por la empresa canadiense GLJ Petroleum Consultants, al 31 de diciembre de 2013, alcanzan a 10,45 trillones de pies cúbicos (TCF, por sus siglas en inglés). En este marco, el Ejecutivo sostiene que cada año Bolivia restituye más gas del que consume, tomando en cuenta que se adiciona anualmente 1 TCF cuando se gasta 0,8 TCF.
El vicepresidente Álvaro García Linera explicó que la ambiciosa inversión de $us 31.000 millones en los siguientes diez años se realizará en dos etapas: una primera fase que será hasta el año 2020 -en el marco del Plan de Desarrollo Económico y Social (PDES)- y una segunda fase de complementación que tomará hasta el 2025 acorde a las metas estipuladas en la Agenda Patriótica.
“Nos hemos propuesto diversificar la generación energética, gas, gas seco, gas licuado de petróleo (GLP), urea, plásticos duros y blandos para que las opciones de mercado sean diversas. Cuanto más diversificado tengamos el gas, en sus usos y utilidades, será mejor para el país”, sostuvo García Linera, durante el IX Congreso Internacional Bolivia Gas & Energía, organizado por la Cámara Boliviana de Hidrocarburos y Energía (CBHE), entre el 17 y 18 de este mes en Santa Cruz.
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