El Instituto Frazer del Canadá sostuvo que, “en Bolivia la seguridad política y jurídica es la peor de la región”. La Ley Minera impuso contratos de asociación exclusivamente con el Estado. El país ocupa últimos lugares en la región para atraer capitales para un mayor desarrollo del sector.

En opinión de especialistas entrevistados, la legislación vigente en Bolivia introduce varias medidas de inseguridad jurídica y poca atracción a las inversiones, lo que desfavorece a la producción y eventual industrialización de los variados minerales que posee en su territorio.

“No hay derechos mineros reales, rigen contratos administrativos y contratos de asociación, los recursos mineralógicos no pueden ser inscritos como derechos propietarios y ninguna persona puede alegar ese derecho ni usarlo con fines de titularización, garantía o seguridad”, explicó el exministro Dionisio Garzón, en un reciente debate sobre la situación de la minería, efectuado a mediados de julio pasado en La Paz.

INVERSIONES

De acuerdo con el experto del Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (Cedla), Alfredo Zaconeta, mientras que Chile y Perú tienen elaboradas cartas geológicas al 100 por ciento de la posesión de riquezas, lo que favorece a la inversión de capitales foráneos, en Bolivia llega solamente al 45.7% de su potencial minero. Entre 2014 y 2016, las inversiones en el sector fueron de sólo 197 millones de dólares, expuso Zaconeta en el debate del sector. Garzón estimó que en 2015 se registraron únicamente $us 193 millones en el sector estatal.

ANUNCIO OFICIAL

“Hasta finales de 2019 habrá la inversión más grande del Estado en materia minera, realizaremos una inversión aproximada de 1.500 millones de dólares”, anticipó el ministro de Minería, César Navarro, en una publicación del Ministerio que dirige.

Una encuesta del Instituto Frazer, de Canadá, estableció que Bolivia ocupa el puesto 94, entre 122 países, en 2014.

En América Latina, Bolivia ocupa el lugar 16 de 26 países, por lo que Frazer tenía la opinión, en 2015, que “la seguridad política y jurídica de Bolivia es una de las peores de la región”.

El exministro Garzón sostuvo –asimismo– que otro factor limitante que tiene el país son los contratos de asociación con el Estado, que además deben tener aprobación legislativa. En caso de aprobarse, la participación estatal en caso alguno es mayor al 55%. Como se conoce, las cooperativas no pueden asociar a privados sin perder su cualidad. A partir de la promulgación de la Ley se prohibieron contratos de arrendamiento y los existentes deberán migrar a contratos de asociación.

“La conclusión obvia es que los inversionistas deberán operar con recursos propios o asociarse con el Estado y aceptar la coparticipación de utilidades”, dijo el exministro, por lo que en esas condiciones es muy difícil esperar nuevos flujos de inversiones al país.

MINERÍA ESTATAL

El año 2010, el Gobierno decidió impulsar la puesta en marcha de dos fundiciones de zinc, en los principales departamentos productores de este mineral, que son Oruro y Potosí, las que demandarían la inversión de $us 500 millones. Las cuatro licitaciones realizadas por el Gobierno fracasaron rotundamente, por falta de interesados, aparte de llegar a la constatación de la existencia de vacíos administrativos y jurídicos.

PRODUCCIÓN DE ZINC

El experto en Minería, Alfredo Zaconeta, sostuvo que a lo largo de su historia, Bolivia ha sido considerada como país estañífero, sin embargo, ahora somos un productor masivo de zinc.

Según cifras, en 2017 se han producido 503.675 (TMF), exportándose 471.923 (TMF) por un valor de 1.351 millones de dólares. Hasta el momento, el zinc no es refinado en el país, por falta de fundiciones o refinadoras. Este hecho ocasiona que sus acompañantes (plata, plomo, cadmio, indio, renio y osmio) sean recuperados y aprovechados en otros países como Asia, 310,928 (TMF).

CRISIS MINERA

En opinión de la Fundación Milenio, lamentablemente la valoración de la situación boliviana no ha mejorado con relación a los años anteriores, y en algunos aspectos ha empeorado. En el documento, el rezago competitivo de la minería boliviana indica que en el Índice de Atractivo de Inversión, el puntaje que obtiene Bolivia es 48 puntos menos que Chile, 40 puntos menos que Perú, 30 puntos menos que México, 23 puntos menos que Colombia, 22 puntos menos que Brasil, 19 puntos menos que Ecuador e incluso 3 puntos menos que Venezuela.

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