El incremento de sueldos fijado para este año “preserva la salud de la economía boliviana”, dijo ayer el viceministro de Coordinación con Movimientos Sociales, Alfredo Rada, en declaraciones a la Red Unitel. Sin embargo, varios analistas económicos coinciden en señalar que la medida puede convertirse en un paliativo si no se aplica una política salarial a corto y largo plazo acompañada de incentivos.

Según el analista económico Roberto Laserna, lograr mejores salarios para los trabajadores no depende tanto del incremento  como “decisión política”, sino de  aspectos como ampliar las condiciones del mercado.

El economista explica que “en 10 años los salarios reales han decrecido en vez de haber aumentado, pese a los incrementos del salario mínimo. Eso debía mostrarnos que la decisión política de incrementos no asegura un buen salario para los trabajadores. Un buen salario depende de más inversiones, mayor competencia y la productividad de los trabajadores”.

Laserna manifiesta que lo ideal sería complementar la decisión del aumento salarial con políticas que apoyen las inversiones en el país. “Que la gente quiera diversificar su capacidad productiva de nada va a servir” si no se complementa con una política de economía integral, con la apertura de mercados, con mayor competencia y con más tecnología.

Por su parte, el analista del Instituto de Estudios Económicos Óscar Zegada señala que el Gobierno hace esfuerzos considerables “para recuperar el poder adquisitivo del salario”.

Asimismo, el investigador del Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (Cedla), Bruno Rojas, sostuvo en una entrevista con Erbo, que un incremento salarial acorde a la realidad de los trabajadores debiera tomar en cuenta sólo los ítems importantes del Índice de Precios al Consumidor y no los más de 300 productos de la canasta familiar que sólo disgregan el porcentaje de inflación.

Según Rojas, la variación de precios no es objetiva porque considera una base en función a productos establecidos para 1997, que cambió en 2007 alterando el numero de productos a más de 360 ítems, y variando el promedio.

Entre tanto, la Fundación Milenio propone cinco recomendaciones en un análisis aplicado al incremento salarial en 2014 vigente para esta gestión. La primera apunta a “abandonar la fijación política de los salarios, y especialmente el aumento continuo del salario mínimo nacional”.

La segunda propone “promover la negociación bipartita entre trabajadores y sus empresas” para que los salarios tengan una escala que “aliente la superación y la productividad, y remunere el esfuerzo individual y colectivo”.

La tercera recomendación tiene que ver con “aligerar los costos laborales no salariales (en especial normas sobre despidos y contrataciones) a fin de alentar la incorporación de más trabajadores a las planillas permanentes, en vez de empujar hacia la terciarización de servicios como sucede en la actualidad”. Otra observación apunta a “fortalecer el entorno institucional con garantías  jurídicas para los contratos, inversionistas y trabajadores. Y la última  sugiere “respaldar la incorporación de nuevas tecnologías que  aumenten la productividad y capacitación de los trabajadores.

OPINIONES DE ANALISTAS

Jorge Miguel Veizaga, pte. Colegio Deptal de Economistas CEP-UMSS

Dependiendo de la perspectiva con que se analice el tema, es posible comprender que los efectos del incremento salarial en la economía nacional serán muy diversos. De allí que para que los diferentes actores puedan comprender de mejor modo el curso de los acontecimientos es necesario que el Gobierno pueda ser más explícito e informar abiertamente acerca de los cálculos y estimaciones sobre las que construye su política salarial.

Óscar Zegada, analista  económico

Los sectores empresariales han rechazado la decisión como tal y se sienten opuestos a esta política. Hay que considerar también que el incremento cubre al sector público lo cual va a implicar un déficit  fiscal que está previsto ya para esta gestión. Entonces es posible que el Gobierno tenga que hacer algunos ajustes para que no entre en la parte de recaudación de impuestos. La situación me parece estable, no creo que genere inflación.

Roberto Laserna, analista económico

Los empresarios se defienden del haber salarial incrementando los precios de los productos y por eso este tipo de aumentos terminan siendo inútiles. Por eso la mejor manera de incrementar los salarios es un crecimiento a largo plazo en la economía basado en el aumento de la productividad laboral. Se están incrementando mucho los salarios pero no la productividad, no hay inversiones y esto generará problemas a largo plazo.

Fernando Barbery, Cámara de Industria y Comercio (Cainco)

La carga laboral es cada vez más pesada, independientemente del tamaño de la empresa. Estas medidas (incremento salarial) frenan el crecimiento del sector y postergan las ampliaciones, proyectos y generación de nuevas fuentes de empleo. Además, el nuevo aumento tenderá a ampliar el margen de la informalidad en el país, lo que deriva en empleos mal pagados y trabajadores sin goce de beneficios que les corresponde por ley.

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