La recaudación por ese impuesto se duplicó en dos décadas, según Idesa
 
El informe de todos los domingos de Idesa destacó un dato que considera por demás preocupante: en las últimas dos décadas, de la mano con el fuerte crecimiento del gasto público de las provincias, se duplicó la presión del impuesto a los Ingresos Brutos. De hecho, mientras entre 1991 y 2000 las provincias recaudaron de Ingresos Brutos el 1,9% del PIB, entre 2001 y 2010 recaudaron 2,5% y entre 2011 y 2016 el 3,8%.
Tal como destaca el informe, el crecimiento de la recaudación de este impuesto al que Idesa considera “muy malo” se dio casi a la par del crecimiento del gasto público al nivel provincial: según datos del Ministerio de Hacienda, las erogaciones aumentaron desde poco más del 10% del PIB a comienzo de la década de los ´90 a más del 17% del PIB en el año 2015. “La expansión fue particularmente intensa a partir del año 2003”, sostiene.
Idesa, dirigida por Jorge Colina (foto), destaca: “Estos datos muestran que el crecimiento de la recaudación del Impuesto a los Ingresos Brutos duplicó al crecimiento del PIB en las últimas dos décadas. Como ocurrió con el gasto público, el aumento fue muy intenso a partir del año 2003 con una aceleración a partir del 2011 cuando la bonanza de los precios internacionales se debilitó y las provincias apelaron a aumentar sus ingresos propios como una forma de preservar la autonomía frente a la fuerte concentración de recursos fiscales en el Estado Nacional”.
Y además sugiere: “El Impuesto a los Ingresos Brutos debería ser absorbido por el IVA y el Impuesto al Cheque operar como pago a cuenta de IVA. Para moderar el aumento de IVA habría que eliminar exenciones y alícuotas diferenciales y contemplar devoluciones de IVA sólo a personas en estado de vulnerabilidad”.
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