Esta investigación muestra que El Alto registró el más elevado porcentaje de desempleo (13,5 por ciento) equivalente a 57.908. Le siguen La Paz con 11,6 por ciento (43.840 desempleados), Potosí con 9,4 por ciento (5.444 desempleados), Cochabamba con 8,7 por ciento (20.031 desocupados) y Santa Cruz de la Sierra se ubicó como la ciudad con menos desempleo 8,2 por ciento (54.885 desempleados).

La investigación justifica estos niveles por la caída de los precios internacionales de los minerales, la pérdida de la Ley de Promoción Comercial Andina y Erradicación de Drogas (ATPDEA) y la contracción de la demanda de los hogares de los países compradores de productos bolivianos.

En tanto, el Ministro del Trabajo, Walter Delgadillo ratificó la tasa de 7,55 y subraya que esta tasa es menor al 7,66 por ciento registrado el 2007. No obstante Delgadillo, reconoce y destaca que los sueldo son bajos en el país.

El Gobierno aseguró que este año se generaron 150.000 empleos y que la tasa de desempleo bajará a menos del 7,5 por ciento hasta diciembre gracias al crecimiento económico de 6,5 por ciento.

ESCEPTICISMO EN EL EMPRESARIADO

La Confederación de Empresarios Privados de Bolivia destaca que

estimaciones de entidades y fundaciones privadas estiman una tasa que estaría por encima del 12%.

“Las cifras oficiales son menores pero la realidad es una sola. Hoy es muy difícil encontrar empleo y con el regreso de los migrantes, las cifras de desempleo tenderán a crecer más” señaló Dabdoub.

Al respecto, el director de la Fundación Milenio, Napoleón Pacheco, dijo que la estimación de Delgadillo es «mentirosa» debido a que la inflación que superó el 10 por ciento los dos últimos años quitó la capacidad de compra a los salarios reales haciéndolos cada vez más reducidos.

El investigador del Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (Cedla) Carlos Arze cuestiona las cifras del Ejecutivo y aseguró que la tasa de desempleo alcanza al 10 por ciento, según una reciente encuesta realizada por la entidad. Esto implica que más de 350.000 personas en el país no tienen una fuente de sustento digna.

Además, recordó que una de las estrategias de generación de empleos que propuso el Gobierno era el Programa de Vivienda Solidaria. Se esperaban alrededor de 70.000 empleos, sin embargo, sólo ser aprobó unas 25 mil solicitudes, su impacto es mínimo y no alcanza a satisfacer las necesidades de empleo. En el caso, de la minería los proyectos más importantes como San Cristóbal no albergan a un número importante de mano de obra porque utilizan tecnología de punta en la extracción.

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