Para la CGTFB, las Federaciones de Fabriles de Santa Cruz, La Paz, Cochabamba, Riberalta Beni, Oruro, Potosí, Chuquisaca, Tarija y Pando, la Federación de Fabriles en Exportación, la Regional de Trabajadores Fabriles de El Alto, las Intersindicales, los sindicatos de las fábricas y los Comités Sindicales, tenemos en claro que las circunstancias mundiales no son las más alentadoras estamos ante una crisis mundial que ha entrado a su cuarto año. Bolivia no esta blindada para resistir sus efectos, a nivel de la caída del salario y de la perdida de fuentes de trabajo, la tendencial espiral inflacionaria es también una manifestación de esta crisis.

Los trabajadores y la clase obrera fabril somos los que sufrimos en primera instancia esos efectos, como siempre ha ocurrido en estos periodos históricos de ciclos descendentes del capitalismo. Estos hechos dan la particularidad a este día del trabajador fabril, a 61 años de la masacre de Villa Victoria.

En estas circunstancias, solo podemos enfrentar esta arremetida que tiende a pasar todo el peso de la crisis sobre las espaldas de los trabajadores y nuestras familias, forjando nuestra unidad, fortaleciendo nuestra organizaciones sindicales, a nivel de cada fábrica, de cada región y a nivel nacional, incluso internacional. Este proceso de fortalecimiento, de unidad y de construcción de la conciencia obrera, debe estar cimentado sobre bases políticas revolucionarias o sea de una comprensión cabal de que las tendencias a la crisis del capitalismo sientan las bases y la posibilidad de estructurar una sociedad sin clases sociales, una sociedad socialista.

1.- La huelga general de mayo de 1950, que termino en uno de los hechos históricos más importantes para el proletariado fabril, una de las muchas masacres de los gobiernos de turno, sean liberales o nacionalista, se ha convertido en el día del trabajador fabril. Esta Huelga, fue la demostración más importante de los obreros fabriles en el marco de la lucha que llevaron a cabo los trabajadores del campo y la ciudad contra la rosca minero feudal, fue el prologo que llevó a la clase obrera a la histórica revolución obrera de 1952, la cual impuso una verdadera revolución estructural, nacionalizando la minería, imponiendo una reforma agraria (entrega de tierras al campesino), una reforma de la educación, etc. Dichas reformas las impusieron las clases trabajadoras bajo la dirección obrera, aplicando un método de lucha, la acción política organizada. Los límites de esas reformas fueron expresión de la traición del movimientismo (MNR).
2.- La clase obrera fabril, debe tener claro, que la masacre de Villa Victoria, no fue un hecho aislado, fue parte de la insurgencia del proletariado fabril que desde 1930 hasta el año cincuenta y dos, protagonizaron en la perspectiva de construir una Bolivia Nueva en el marco de un mundo nuevo.

3.- Las luchas obreras, fueron y son la demostración de que no existe fronteras entre la lucha cotidiana que se da en cada fábrica, sea este la reincorporación de un obrero despedido, la mejora de la atención de comedor, la mejora de las condiciones de trabajo, la lucha por el incremento salarial, el respeto al fuero sindical, el rechazo a la flexibilización de la Ley General del Trabajo etc., con la lucha por mejorar las condiciones de vida de la humanidad. Lucha económica y lucha política son una misma. En esa perspectiva la clase obrera fabril trascendió el límite de la lucha obrero patronal, a la lucha abiertamente política contra el régimen de Urriolagoitia, con sus métodos de lucha la huelga general, entendida esta como la paralización de la producción, que en germen plantea la lucha por el poder. Estas mismas circunstancias se han dado en diversos momentos de la historia de la clase obrera fabril boliviana, son lecciones que no debemos olvidar.
4.- Como antes del 50, los trabajadores hemos dado golpes certeros a los neoliberales, pero no hemos avanzado en quebrar el sustento real de su poder, su poder económico, el monopolio de los medios de producción. El nacionalismo de contenido burgués, como en el pasado, solo nos puede llevar a un callejón sin salida y a una frustración más para las clases trabajadoras y como el MNR posterior a 1952 solo preparó la venida de regimenes dictatoriales de claras características fascistas, como el de Barrientos, Banzer, Garcia Meza, etc.

5.- A esta situación debemos tomar en cuenta la grave crisis mundial del capitalismo que esta en curso. Recesión mundial con la consabida caída de la demanda de materias primas y la caída de precios que ya empieza a repercutir en la minería de América Latina y Bolivia. Un panorama inflacionario de los precios de los principales alimentos a nivel mundial. El panorama de nuestro futuro esta signado por la recesión, inflación, hambruna, etc. La CGTFB, esta conciente que en estas circunstancias debemos pugnar nuevamente por constituirnos los obreros en clase dirigente, con una política clara, correcta y firme, con una Política Obrera.

6.- Los obreros de Bolivia luchamos, contra la tercerización del trabajo, por una Nueva Ley General del Trabajo, preparamos una lucha por un salario acorde a la canasta familiar. Por la masiva sindicalización obrera. Por la industrialización del país en manos de los trabajadores. Frente al cierre de empresas nacionalización y autogestión obrera.

POR LA CONFEDERACIÓN GENERAL DE TRABAJADORES FABRILES DE BOLIVIA