Riego y producción agrícola

Descripción

Los datos del censo agropecuario confirman que gran parte de la agricultura del país sigue siendo a secano; es decir, que depende de las lluvias para el desarrollo de distintos cultivos. Como puede observarse en el cuadro 1, 286.536 unidades productivas agropecuarias (UPA) que representan el 32,9% del total de UPA censadas en el país cultivaron 268.844 hectáreas (has.) a través de distintos métodos de riego. Esta superficie representa solamente el 7,1% del total de la superficie cultivada en la gestión agrícola 2012/2013, la misma que ascendió a 3.7 millones de hectáreas.

Esta situación explica en parte la baja productividad que caracteriza a la producción agrícola del país, así como la escasez de varios productos agrícolas en determinados momentos del año, situación que obliga a su importación masiva de manera temporal. Este es el caso, por ejemplo, de la producción de papa, que, si bien presenta incrementos anuales relativamente importantes, no logra abastecer la demanda interna durante todo el año.

La mayor parte de las explotaciones agropecuarias que utilizan riego se sitúan en las regiones de los valles y el Altiplano (94,0%) concentrando el 68,1% del total la superficie cultivada bajo riego. Asimismo, Potosí, Chuquisaca, Cochabamba y Tarija presentan una proporción importante de UPA que utilizan riego en relación al total de UPA censadas en cada uno de estos departamentos.

El departamento de Santa Cruz – que en la gestión agrícola 2012/2013 cultivó una superficie de 2.7 millones de hectáreas, es decir, el 73,0% de la superficie total cultivada del país- apenas cultivó 82 mil hectáreas con riego.

Debido al peso que tienen las UPA con riego en las regiones de los valles y del Altiplano y al escaso desarrollo del riego en los llanos, el promedio de hectáreas cultivadas con riego por UPA que utilizan riego es extremadamente bajo (0.93 hectáreas/UPA).

Como puede observarse en el cuadro 2, el método de riego más utilizado en todas las regiones del país es aquel que se produce por gravedad. La literatura especializada lo considera como un antiguo o primitivo sistema de riego que se emplea todavía sobre todo en sembradíos de pequeñas dimensiones. Y si bien este sistema puede ser utilizado en superficies cultivadas de mayores extensiones, el mismo requiere de estudios técnicos que adecuen este método al tipo de cultivo, suelos, temperaturas, etc.

Los departamentos de La Paz y Cochabamba y sobre todo los departamentos de los llanos, presentan porcentajes importantes de utilización de métodos más modernos como el de aspersión y el de goteo.

Finalmente, y como se puede observar en el cuadro 3, once cultivos concentran el 71,3% del total de la superficie cultivada bajo riego en el país y que, por orden de importancia, son los siguientes:

 

La Paz, 11 de noviembre de 2016