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Hablemos de empresas chinas y no de chinos en Bolivia

La creciente presencia de empresas chinas alrededor del mundo resultado de la política de apertura económica denominada “Salir al Exterior” de la República Popular China (RPC) ha resultado en un flujo sin precedentes de ciudadanos chinos al extranjero.

En el año 2012, 87,436 trabajadores chinos viajaron a América Latina para trabajar en grandes proyectos mineros y otros. Bolivia no ha estado exenta de esta tendencia migratoria de trabajadores chinos. En el caso boliviano, la presencia de estos trabajadores responde en gran parte a la creciente contratación de empresas chinas en los mayores contratos del Estado resultado de los contratos “llave en mano”. Si bien no se conoce con exactitud cuántos trabajadores chinos han llegado al país, se sabe que desde el 2014 “el número de ciudadanos chinos con visa de residencia –transitoria, temporal o definitiva– en Bolivia se incrementó casi nueve veces: de 805 en 2014 a 7.160 hasta la segunda semana de marzo de 2018”.

En concreto buscamos indagar cómo las noticias sobre denuncias a empresas chinas son tratadas en el país, qué lenguaje utilizamos y a quién nos referimos cuando hablamos de estas denuncias. Todo esto con el fin desenmascarar discursos y destacar problemáticas que estos señalamientos en contra de ciudadanos chinos pueden ocultar. Al mismo tiempo, este artículo da inicio a Comprendiendo la compleja relación entre China y Bolivia, una editorial que busca promover una discusión seria e informada sobre la presencia de capital y empresas chinas en el país por medio de una serie de artículos de opinión que contextualicen la violación de derechos socio-laborales de empresas chinas en el ámbito boliviano e internacional.

Serie: Comprendiendo la compleja relación China-Bolivia 1: Hablemos de empresas chinas y no de chinos en Bolivia

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