Temporalidad en la producción agropecuaria y trabajo extra predial

Descripción

Si bien el Censo Nacional Agropecuario de 2013 no indagó acerca del trabajo permanente o temporal de los trabajadores agropecuarios asalariados (omitiendo una información que es realmente muy importante), si lo hizo en relación a los miembros de las unidades productivas agropecuarias: los productores titulares, conyugues, hijos dependientes y otros parientes dependientes.

Estos datos de una parte de la fuerza de trabajo que participa en las actividades agropecuarias del país, permiten, sin embargo, corroborar algo que diferentes estudios venían remarcando en relación a la importancia que va teniendo el trabajo temporal o estacional en la producción agropecuaria del país, como consecuencia de su orientación marcadamente mercantil y, por tanto, cada vez más especializada. En efecto, del total de los miembros de las unidades productivas agropecuarias del país, el 53,1% realiza actividades agropecuarias en sus predios de manera temporal. En la región del Altiplano este porcentaje es de 53,4%, en los valles es de 51,5% y en los llanos de 55,7%.

La información revela que los departamentos de Pando, Beni y Oruro presentan los mayores porcentajes de miembros que realizan trabajos temporales en sus propias unidades productivas agropecuarias. En el caso Pando (74,7%) debido a la importancia que tiene para su economía la extracción de castaña que es marcadamente estacional, en el caso del Beni (62,1%) debido a la importancia de la ganadería bovina extensiva que no requiere la presencia permanente de fuerza de trabajo familiar en el predio, y en el caso de Oruro (66,4%) por la relevancia de la ganadería camélida y ovina que tampoco requiere la presencia permanente de todos los miembros de las unidades productivas en los predios y, que, por tanto, tienen sus principales ocupaciones en otras ramas de la economía.

¿Quiénes son estos miembros de las unidades productivas agropecuarias que trabajan de manera temporal en las mismas? En primer lugar, miembros de unidades agropecuarias pauperizadas que se ven obligados a conseguir ingresos extra prediales, tanto por la vía de la venta temporal de fuerza de trabajo en el mismo sector agropecuario y en otras ramas de la economía, o a través de actividades independientes estacionales en áreas urbanas y rurales. En segundo lugar, los denominados “residentes”; es decir, miembros de las unidades productivas agropecuarias que residen en un lugar diferente al emplazamiento de éstas (generalmente en las ciudades) y que retornan al predio para realizar alguna actividad productiva y/o administrativa en momentos puntuales de la producción agropecuaria, después de los cuales retornan nuevamente a sus lugares de residencia habitual donde desarrollan sus principales actividades económicas.

 

La Paz, 6 de julio de 2016