Comunidades y trabajo asalariado en la agricultura

Descripción

Como señalábamos en un artículo anterior, uno de los datos novedosos del Censo Nacional Agropecuario 2013, es aquel relacionado con la importancia que va adquiriendo el trabajo asalariado en la producción agropecuaria en todas las regiones del país. Esta información desagregada entre las unidades productivas agropecuarias (UPA) que pertenecen a comunidades[1] y UPA que no pertenecen a ninguna, brindan más pistas para conocer los cambios que se han venido operando en la sociedad rural boliviana desde la reforma agraria de 1953 a la fecha.

En algunos círculos persiste la idea en sentido que en las comunidades campesinas e indígenas no existe la compra y venta de fuerza de trabajo asalariada para la producción agropecuaria, por lo que no existiría el menor atisbo de diferenciación social entre sus miembros. En este sentido, estas comunidades seguirían caracterizándose por un altísimo grado de homogeneidad social, rasgo típico de las comunidades con fuertes rasgos de economía natural.

Debido al carácter de este espacio, no abordaremos en este pequeño artículo un análisis acerca de los planteamientos que llevan a ese tipo de aseveraciones y nos abocaremos simplemente a verificar si éstas tienen asidero a la luz de los datos estadísticos generados por el último censo agropecuario.

Sobre un total de 945.185 UPA censadas, 890.882 (94,2%) forman parte de alguna comunidad y 54.303 UPA (5,8%), no pertenecen a ninguna. Los datos también nos señalan que en el país existen 334.705 UPA que contratan trabajadores asalariados para la producción agropecuaria, de las cuales 306.950 (91,7%) forman parte de alguna comunidad y sólo 27.755 (8,3%) no pertenecen a ninguna.

Durante la gestión agrícola 2012-2013 fueron utilizados un total de 2.535.128 trabajadores asalariados, de los cuales 2.340.761 fueron demandados por UPA que forman parte de alguna comunidad, mientras que sólo 194.367 fueron utilizados por explotaciones agropecuarias que no pertenecen a comunidad alguna.

Si bien el porcentaje de UPA que contratan fuerza de trabajo asalariada es mayor entre aquellas que no pertenecen a ninguna comunidad (51,1%), el porcentaje de UPA que pertenecen a comunidades y que producen con el concurso de trabajadores asalariados no es despreciable (34,5%). Asimismo, si bien el 68,2% del total de trabajadores agropecuarios utilizados por las UPA que no pertenecen a ninguna comunidad son asalariados, este porcentaje en el caso de las comunidades es del 53,1%.

Finalmente, interesa destacar los siguientes datos. La mayor parte de las UPA que no pertenecen a comunidades y que contratan trabajadores asalariados se concentran mayoritariamente en los llanos (55,2%) y los valles (30,1%) concentrando también la mayor parte del trabajo asalariado demandado (54,8% y 31,5%, respectivamente)

En el caso de las UPA asentadas en comunidades, aquellas que contratan fuerza de trabajo asalariada se concentran mayoritariamente en la región de los valles (41,4%) y la región del Altiplano (40,3%), demandando también la mayor parte de los trabajadores asalariados utilizados en las comunidades del país (40,7% y 30,7% respectivamente).

Finalmente interesa destacar que los departamentos de Potosí y de Oruro son los únicos que presentan todavía bajos porcentajes de utilización de fuerza de trabajo agrícola asalariada entre las UPA que pertenecen a comunidades. El resto de los departamentos presentan porcentajes relevantes y, en varios de ellos (Santa Cruz, Beni, Tarija, Cochabamba y La Paz) el trabajo asalariado es ya superior al trabajo no asalariado en la agricultura

La Paz, 12 de octubre de 2016


[1] El Censo Nacional Agropecuario 2013 definió como comunidad a la “unidad básica de organización social, constituida por agrupaciones o familias campesinas, indígenas, interculturales y afrobolivianas, que habitan y controlan determinado territorio. Desarrollan sus actividades productivas, económicas, de acuerdo con sus usos y costumbres. Se incluyen en esta categoría brechas, campos, colonias, fajas, sindicatos y otros similares”. INE (2015) Censo Nacional Agropecuario 2013.