Tarija, Chuquisaca y Oruro registraron las mayores caídas. Los principales productos de exportación de estos departamentos son el gas y los minerales.
Las exportaciones de Chuquisaca, Tarija y Oruro cayeron en más del 30% durante el año pasado con relación a 2015, de acuerdo con información publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
El descenso se debe principalmente a los bajos precios de las materias primas en los mercados internacionales.
Según el reporte, de los nueve departamentos del país, seis registraron disminuciones en el valor exportado, solamente La Paz (15, 3%), Potosí (18,3%) y Beni (1,9%) mostraron cifras positivas en sus ventas al exterior con respecto la gestión anterior.
Las exportaciones de Tarija se redujeron de 2.911 millones de dólares a 1.491 millones, un 48,8% menos que el año pasado.
Álvaro Baldiviezo, presidente de los Empresarios Privados de Tarija, señaló que esta reducción se debe principalmente a la pérdida de valor comercial del gas natural.
Debido a esta situación el departamento se encuentra en crisis económica, ya que sus ingresos dependen de la renta petrolera. “No hemos podido diversificar nuestra oferta y ahora somos susceptibles a las fluctuaciones del mercado de los hidrocarburos, lo que genera un efecto negativo en nuestra economía”, explicó.
El representante empresarial indicó que el bajón de ingresos ha generado la paralización de obras públicas y un menor dinamismo económico en la región.
“Tenemos obras paralizadas porque no existen los recursos para cancelar las planillas”, precisó.
Las exportaciones de Chuquisaca bajaron a 42,6 millones de dólares en 2016, un 41,3% menos que en 2015.
El gerente regional de la Cámara de Industria y Comercio (Cainco) de esa región, Lorenzo Catalá, sostuvo que el descenso está vinculado a la caída en los precios del gas. Sin embargo, destacó que las ventas en el sector no tradicional reportaron un incremento del 6%.
“Es casi 42% de reducción y se debe a las exportaciones de gas, pero en contrapartida, las ventas de nuestros productos no tradicionales han incrementado sus ventas en 6%, pero aún son muy pequeñas para ser determinantes en el total”, apuntó.
Las exportaciones no tradicionales del departamento en 2016 llegaron a 8,8 millones de dólares, principalmente sombreros y orégano, entre otros.
El tercer departamento más golpeado en su comercio exterior fue Oruro, que disminuyó sus ventas al exterior hasta 310,9 millones de dólares, un 35,3% menos que en 2015.
Fernando Dehene, presidente de la Federación de Empresarios Privados de Oruro (FEPO), atribuyó el bajón a la caída de la cotización internacional de los minerales.
La minería es la principal actividad económica del departamento y representa casi el 100% de las exportaciones.
Renta petrolera
El presidente del Estado, Evo Morales, durante la presentación del informe de gestión el 22 de enero, reveló que la renta petrolera disminuyó de 3.837 millones de dólares en 2015 a 1.746 millones de dólares en 2016, un 54,4% menos.
Mientras que los ingresos del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) se contrajeron de 1.518 millones dólares en 2015 a 898 millones de dólares en 2016, un 40,8% menos.
Ventas al exterior
Reducción Según el Instituto Nacional de Estadística, las exportaciones en 2016 fueron un 19% inferiores a las de 2015, al bajar de 8.911,9 millones de dólares a 7.214,2 el año pasado.
Sectores Las ventas del sector hidrocarburos fueron 46,8% menores en 2016, mientras que las ventas agropecuarias crecieron en 7,2%, al igual que las de minerales 9% y las de manufacturas en 3,6% con relación a 2015.
Falta diversificación productiva en regiones
De acuerdo con los representantes empresariales de Tarija, Chuquisaca y Oruro, la causa real de la disminución de las exportaciones en las regiones es la falta de diversidad productiva.
“Dependemos completamente del gas o los minerales y no hemos podido cambiar a una matriz industrial, lo que nos hace susceptibles a los mercados internacionales”, explicó Lorenzo Catalá, gerente de la Cámara de Industria y Comercio y Servicios (Cainco) de Chuquisaca.
Por su parte, Fernando Dehene, presidente de la Federación de Empresarios Privados de Oruro (FEPO), manifestó que esta transformación es una de las promesas incumplidas del Gobierno.
“El Gobierno prometió convertir a Oruro en un polo de desarrollo, impulsando la industria, pero no hemos visto ningún cambio en nuestra matríz productiva en 11 años”, explicó.
Según el presidente de FEPO, existe potencial industrial en la región, pero para desarrollarse requiere apoyo de la Gobernación y del nivel central del Estado para dar valor agregado a los productos.
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