La Razón / Wálter Vasquez / La Paz

02:44 / 20 de marzo de 2012

Datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) señalan que, de enero de 2008 a enero de este año, el valor de importación de combustibles con origen venezolano subió de $us 8 millones a 56,33 millones. El incremento en la compra de este tipo de producto en el primer mes de 2012 es de 90,9% en relación a similar período de la gestión anterior (ver infografía).

A decir del director ejecutivo del Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (CEDLA), Javier Gómez, “a más de un año de que la población boliviana haya obligado al Gobierno a retractarse del gasolinazo (31 de diciembre de 2010), el Ejecutivo aún mantiene una política frágil en relación a la sustitución de la matriz energética, a la transformación productiva vinculada al gas y al control del contrabando en las fronteras del país”.

De acuerdo con el informe de la Deuda Pública Externa de Mediano y Largo Plazo de Bolivia publicado por el Banco Central de Bolivia (BCB), hasta el 31 de diciembre de 2011, el saldo de la deuda de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) llegó a $us 422,6 millones (el 94,3% corresponde a obligaciones con PDVSA por la compra de diésel), siendo que el saldo de la deuda de la petrolera estatal en 2010 fue de $us 311,1 millones.

Análisis. “Todo lo que el Gobierno está haciendo está motivando a un mayor consumo de diésel y gasolina (…) y es muy probable que la tendencia de crecimiento vegetativo en el consumo de energía se incremente en los próximos años”, dijo Gómez.

Según el Plan de Inversiones 2009-2015 de YPFB, de no concretarse el proyecto GTL (gas a líquidos) y la tercera refinería del país para reducir los “crecientes” déficits de hidrocarburos líquidos en el país, el impacto económico del subsidio al diésel ocasionaría al Estado un gasto de $us 1.314 millones hasta 2015 y de $us 10.372 hasta 2026. La demanda promedio de crudo subirá de 102 mil barriles por día (Bbld) este año a 125 mil Bbld en 2015.

Para el Director del CEDLA, políticas como la legalización de 71.995 vehículos indocumentados (principalmente usados) incentivan el transporte individual —que aumenta la demanda interna de diésel y gasolina— y no un “eficiente transporte público masivo”, como es tendencia en el transporte de países desarrollados.

Entre otras cosas, el Gobierno “está incentivando al uso de maquinaria con diésel y tiene muy baja cobertura en el servicio de gas domiciliario y para el sector automotor. Todos estos elementos no resuelven el problema del aumento de la importación y más aún incrementan el consumo de combustibles líquidos”, indicó Gómez.

Para este año se prevé que el costo total de la importación de 762.381 metros cúbicos de diésel será de $us 880.62 millones. Datos del INE, elaborados por el Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), señalan que en enero de 2012, Bolivia compró de Venezuela 33 productos por un valor de $us 58 millones. El 96,68% de las importaciones son diésel; el 1,76% productos laminados planos de hierro o acero enrollado; el 0,65% productos laminados planos de hierro o acero sin alear; y el restante 0,92% otros productos.

Productos que van a Venezuela

En enero, Venezuela compró de Bolivia 13 productos por un valor de $us 6 millones, siendo los principales aceite de soya en bruto (52%), telas y fieltros (12,7%), torta de soya (9,2%), t-shirts y camisetas de algodón (7,7%), artículos de cama y similares (5,2%), aparatos para agricultura u horticultura manuales o de pedal (4,4%), maderas distintas de las coníferas (4%), entre otros.

En enero, tres carburantes se importaron de cinco países

En enero, Bolivia importó combustibles (GLP, diésel, gasolina) de cinco países de la región: Venezuela, Argentina, Brasil, Chile y Perú. El valor de la compra total llegó a $us 96,58 millones. Así lo señalan los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), que también indican que en la gestión 2011 la importación de líquidos también tomaba en cuenta la producción de Paraguay.

Durante el primer mes del año, el 58,32% de lo internado provino de Venezuela, el 22,35% de Argentina, el 14,34% de Brasil, el 4,94% de Chile y el 0,01% de Perú (ver infografía). El volumen de la importación de combustibles llegó a  92.548 toneladas (t), por los que se pagó $us 96,58 millones, frente a  las 59.332 t que se internaron en 2011 por $us 50,13 millones.

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